"Porque es nuestro existir, porque es nuestro vivir, porque él camina, porque él se mueve, porque él se alegra, porque él ríe, porque él vive: el Alimento"



Códice Florentino, lib,VI, cap.XVII

viernes, noviembre 03, 2006

Esta es la feria de los Santos de la comunidad de Huáncito, que pertenece a la Cañada de los Once Pueblos.


Pollitos de colores con gorras


Un descansito


Atole de caña y zitún (zarzamora)


En el hermoso Parque Nacional Lago de Camécuaro, bien tranquilo y limpio.

Estas señoras que están aquí, son de Tarecuato, un pueblo de la meseta Purepecha y de las comunidades indígenas mas hermosas de esta región. Conservan su vestido y su lengua, de hecho, creo que los únicos intrusos que estabamos ahí eramos Gonzalo y yo. El pueblo luce con sus calles empedradas y sus paredes de adobe de un intensísimo color sepia. Toda esta región llama la atención por el color rojo de su tierra.

Esa mañana la comunidad tenía una gran reunión en el atrio de su Iglesia Franciscana del siglo XVI, yo creí que estaban vendiendo, y pregunté el precio de unos buñuelos, una señora me dijo que no se vendían, que se cambiaban por velas, por pan, tamales, chayotes, etc. De repente la señora, al ver que yo no tenía nada para darle a cambio, generosamente me dijo que tomara de sus buñuelos y de su pan. Nos obsequió no sólo con eso, a Gonzalo le regaló una bolsa de tamales, no dos, ni tres, nos dió como quince. No aceptaba que nuestra negativa a sus regalos. Como no teníamos lo esencial para cambiarlo con ella, le tuvimos que dar de nuestro dinero vulgar. No íbamos preparados para tan distinguido trueque.

Hay que ir en Semana Santa a su Feria del Atole.


Velas, frutas, pan, lo indispensable.


Piquen encima de la foto para verlas mejor

Más tarde, llegamos a un encantador pueblito que todo mundo menciona y pocos lo conocen:




Sus famosos panes y su iglesia

Mi hija mayor anda apurada con su tesis y su investigación para que se logre dar al queso cotija denominación de origen y estandarizar su proceso, es un queso que se hace en una parte de la región de Jalisco y de Michoacán. Nostros por supuesto que teníamos que ir hasta Cotija por una pinche carretera que está para llorar, era tanto el cariño que no importó que nos perdiéramos y por fin llegáramos a COTIJA llenos de polvo y mallugados con tanto bache.


La mayoría de las tiendas y en el mercado donde vendían el queso tenían el mismo olor a añejo, característico de este queso.

1 comentario:

gastonnano dijo...

ME PODRÁS EXPLICAR QUE PARTE FESTEJAS DE LOS POLLITOS CON GORRA? trAeme a un bebe tuyo recién nacido que lo pasamos por látex violeta y le ponemos una gorra, y después me contas cuanto hay para FESTEJAR. EL PROBLEMA MAS ALLA DEL QUE HACE ESA CRUELDAD CON LOS POLLITOS, SON LOS PELOTUDOS IGNORANTES, INOPERANTES, INCAPACES QUE COMPRAN ESO.